Escenarios de novela V. Lugares de ficción de La tumba del héroe
En este artículo voy a romper con la monotonía y hablaros de los lugares completamente ficticios de la novela.
La casa de Antonio en Madrid: No hay nada de real en este lugar. Ni siquiera sería capaz de precisar la situación en la que podría encontrarse dentro de la ciudad. Podría tratarse de cualquier piso en un barrio humilde, de escasas dimensiones y precios sangrantes de los que abundan por la capital.
La casa de Elisa, en vía Tuscolana, Frascati (Roma): La casa, la piscina, el garaje, las verjas… solo existen en la novela. La ciudad en la que se sitúa es uno de los municipios que pertenece al llamado “Castelli romani”. Su nombre se remonta al siglo XIV cuando, debido al traslado de la sede papal a Avignon, Roma paso por dificultades económicas y los romanos salieron de la ciudad para refugiarse en los castillos feudales. En la época del imperio romano la región de los “Castelli romani” ya era frecuentada por los nobles como lugar para pesar los meses de verano. También los papas, pues la residencia de verano del papa, Castel Gandolfo, es una de las poblaciones de los “Castelli”. El motivo es claro, debido a los lagos de la región y a la altitud en la que se encuentran sus municipios es un lugar ideal para escapar del calor agobiante de Roma.
El hostal en Roma donde se hospeda Antonio: Absolutamente inventado. No existe nada parecido, por lo menos que yo sepa. El lugar sólo cumple una función, que transcurra la acción que en él se desenvuelve. Es cierto que entorno a la estación central de Termini existen infinidad de hostales y viviendas turísticas a un precio muy asequible y con calidad discutible, pero ninguno de ello se trata de este hostal.
El Antro Mediterráneo, el bar en el que desayuna Antonio: Está en el limbo entre realidad y ficción. El local no existe, lo único real es el nombre, pues lo vi una vez en Cerveteri y se me quedó grabado en la memoria y en mi cámara fotográfica.
El archivo histórico de Roma: Otro lugar creado en mi imaginación. Intenté buscar uno que se adaptará a la escena, pero no lo encontré. Lógicamente el lugar en que está ubicado tampoco existe.
El Franky’s club, el local en la playa de Ostia: El nombre y la descripción del bar son inventados. Aunque podría tratarse de alguno de los chiringuitos que ocupan las playas de la ciudad y que tiene gran fama y afluencia.
¡Abrazotes!
